Hemos salido 45 minutos antes de la hora de quedada de casa, o sea a las 6.15 y hemos perdido el autobús de las 6.15 por lo que después de 20 min en la estación, congelándonos con nuestro café del starbucks en mano, nos hemos montado en el bus 42 que nos lleva en “20 minutos” al hospital...cuando despuésde 20 minutos habíamos recorrido sólo la mitad del camino hemos decidido escribirle a Pascual para decirle que nos retrasábamos un pelín. A las 7 en punto entrábamos a la sesión, el morning report, just on time! Buffffff...
Pues así, mal, ha empezado el día y ha seguido peor por la mañana, y por la tarde...grrrrrrr... Para empezar no entiendo un garete a estos americanos con su patata en la boca y la voz de susurro (Susana los entiende unpoco mejor, pero tampoco ha sido mucho mejor para ella...). Los residentes superamigables con los que en teoría teníamos que intimar para aprovechar mejorla rotación tienen cara de culo y nos ignoran todo el tiempo. Comen sin avisarnos, cuchichean sin que nos enteremos y cuando preguntan, se nos queda una cara de idiota... no entiendo sus chistes, no entiendo sus infinitas puñeteras e incomprensibles siglas médicas y no los entiendo a ellos!!! Grrrrrrrr....
Iba a darme una ducha, para cenar pronto y dormir rápido pero el día ha acabado de redondearse cuando, no diré cuál de las dos, ha tenido a bien embozar el wc!! Llevamos 1h esperando que alguien nos arregle el váter y pienso que I want to cry and I want to go back home!!!
nenas!!! no se desanimen!!!!!!!!!!!!!! ya veran que el día a día mejorará!!!
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